“Yo no entiendo por qué el gobierno le da la espalda al campo. No se da cuenta de que por ir en contra de nuestro sector van en contra del pueblo”, dispara Alfredo de Ángeli, el candidato a senador nacional de Unión por Entre Ríos, que logró el segundo puesto en las Paso con el 23,5 % de los votos.
De Ángeli conoce al campo como pocos dirigentes. Su actividad privada es la agricultura: junto a su socio (su hermano mellizo), arriendan campos y se encargan de cultivarlos. Por eso, sabe que es una palabra autorizada para hablar del tema: “Si tomamos en cuenta el crecimiento de Brasil, Uruguay y Paraguay, nosotros tendríamos que estar produciendo 130 millones de toneladas de granos, sin contar el algodón. Pero nos dan la espalda y toman medidas caprichosas, y eso hace que entren menos divisas al país”, explica a El Litoral.
“Yo me acuerdo que hace un año había bastante trigo, pero no nos dejaban venderlo. Por eso, los productores decidieron no sembrarlo más. Hoy falta, eso hace que suba el precio de la harina y, entonces, sube el precio del pan”, analiza el referente agropecuario.
Además del trigo, De Ángeli apunta a otra parte del sector que está en crisis: “Estamos produciendo la misma cantidad de leche que hace doce años atrás”, resalta y luego completa: “Cuando cerraron las exportaciones de carne vacuna, en 2006, nos comimos el 20 % del stock ganadero. Muchas hembras en capacidad de reproducción fueron a los frigoríficos y con eso tuvieron un veranito. Pero eso hizo que faltara hacienda, que cerraran más de 100 frigoríficos y que quedaran 11 mil obreros en la calle”.
En campaña
En las elecciones primarias, Unión por Entre Ríos (el frente que lidera y que nuclea al PRO, a Unión por Todos -el espacio de Patricia Bullrich-, al Frente Entrerriano Federal -del ex gobernador Jorge Busti- y a otros partidos independientes) superó por tres puntos a la Unión Cívica Radical, pero quedó muy por debajo del Frente Para la Victoria (que sacó alrededor del 44 % de los votos).
A pesar de la diferencia, De Ángeli cree que hubo un voto castigo al FPV: “Hace dos años sacaron el 58 % de los votos. Ahora bajaron más de 14 puntos. Quiere decir que hay casi un 60 % de los entrerrianos que no está de acuerdo con el gobierno provincial y el nacional”, dice el dirigente. Pero por lo bajo, desde su espacio, lamentan no haber llegado a un acuerdo con el radicalismo, con quienes habían negociado intensamente. Con la suma de ambos partidos, estarían disputándole codo a codo la elección al oficialismo.
A pesar de que el referente agropecuario dice que la parte dura de la campaña comenzará a mediados de septiembre, ya se pasa los días recorriendo su provincia y escapándose a Capital Federal para participar de programas de televisión.
Durante una jornada, por ejemplo, recorre Cerrito, Viale y Nogoyá “para saludar a los fiscales y conocer si tuvieron algún problema”, según explica. Aprovecha hasta las paradas en estaciones de servicio para bajarse a saludar y hablar con la gente. “Veo muchas personas que no vienen de la política partidaria y que quieren participar. Muchos jóvenes que se van involucrando y eso me pone contento”, asegura.
Su objetivo
Si bien este candidato es un fiel exponente del campo, asegura que ya no sólo habla por ese sector. “Quiero representar al conjunto de los entrerrianos y a todos los argentinos en el Senado”, indica. Y completa: “Por eso, estoy pensando en cómo sacar a la gente de la pobreza, en dejar de gastar y comenzar a invertir en educación, en hacer que Argentina sea un lugar creíble para los inversores. Hay que hacer respetar la Constitución y darle respaldo a la independencia de la justicia”.
A pesar de estar consolidándose como un político importante en su provincia, De Ángeli jura que no piensa más allá de las elecciones de octubre y que tiene la mira puesta sólo en el Congreso. Desde allí, confía en que podrá cambiar algunas políticas agropecuarias que son erróneas. Por eso, para terminar, sentencia: “Este gobierno, en vez de buscar soluciones se especializó en buscar culpables. Y los únicos culpables son ellos. Porque con el egoísmo y la soberbia que tienen han perjudicado al campo. Y al hacerlo, perjudicaron al país”.
Desembarco en la política
La irrupción de Alfredo de Ángeli como político sucedió durante el enfrentamiento entre el gobierno y el campo, en 2008. Si bien ya había participado de otros cortes de rutas, los medios nacionales lo descubrieron durante la puja por la 125, cuando daba sus discursos desde arriba de un acoplado, “con estilo formal, una narrativa campechana mezclada con una dosis de tribuna futbolera y una sorprendente habilidad para manejarse ante las cámaras de televisión”, según lo definía el diario La Nación por aquellos días. Su fama impensada le valió, entre otras cosas, que el grupo La Güella le dedicara el chamamé “Alfredo chacarero”.
Para el hombre de 57 años, oriundo de Gualeguaychú de una familia de diez hermanos, los ‘90 tampoco fueron una década fácil: durante esos años perdió un campo y tuvo que vender un camión e hipotecar su casa para pagar deudas. Sin embargo, allí en su ciudad se lo recuerda como el hombre que, mientras pasaba por una mala situación económica, devolvió un maletín lleno de plata a un empresario que lo había extraviado.
La honestidad es otra de las banderas que levanta De Ángeli como candidato a senador. De allí que su lema predilecto de la campaña sea: “Quiero llegar al Congreso, pero como las garzas entre el barro: limpito”.
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